Infección por parásitos en las vacaciones

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Infecciones durante las vacaciones

Las infecciones intestinales durante los viajes son muy frecuentes. Cada año aumentan más los casos de personas que vuelven de sus vacaciones con trastornos intestinales. Puede deberse a un cambio en nuestros hábitos alimenticios y rutinas, pero también a infecciones bacterianas, víricas o parasitarias.

Con el aumento de los viajes internacionales de larga distancia aumentan también los riesgos, sobre todo si viajamos a países con condiciones higiénicas escasas. Sabías que en estos viajes puedes infectarte por algún parásito que te dé diarrea, flatulencias y malestar general?

Riesgo de infección en las vacaciones

Antes de tu viaje, conviene que te informes sobre las enfermedades más comunes que podrías adquirir en tu destino. De este modo, podrás prevenirlas más fácilmente. Las personas que están de vacaciones en estos destinos son las más vulnerables frente a estas enfermedades ya que no tienen ninguna inmunidad frente a ellas.

El riesgo de adquirir una infección durante las vacaciones aumenta ante determinadas circunstancias:

Viajes de más de 30 días

Vacaciones en zonas rurales o aisladas

Viajeros menores de 15 años y mayores de 65. Los niños menores de 5 años y las mujeres embarazadas son especialmente vulnerables

Tipos de infecciones durante las vacaciones

En general, podemos distinguir las infecciones que se pueden padecer durante las vacaciones en 3 grandes grupos:

Enfermedades transmitidas por insectos: malaria, filaria, leishmania, borrelia, sarna…

Enfermedades transmitidas por el agua o el consumo de alimentos infectados: diarreas, entre ellas las provocadas por parásitos como Entamoeba, Giardia, Oxiuridos, ascáridos y trichuridos (gusanos intestinales)

Otras enfermedades infecciosas como la hepatitis B, la hepatitis C o la tuberculosis

Recomendaciones para prevenir las infecciones durante las vacaciones

Para prevenir las infecciones durante tus vacaciones, debes asegurarte de varias cosas:

  • Consume sólo alimentos correctamente cocinados a altas temperaturas, especialmente el pescado y el marisco. En el caso del pescado, es muy recomendable que haya sido congelado durante 72 horas antes de cocinarlo. De este modo evitarás la infección por Anisakis
  • Evita la comida servida en puestos callejeros, que haya estado expuesta al aire libre, incluida la fruta que ya esté pelada.
  • En algunos casos los microorganismos que han infectado la comida han sintetizado toxinas que son resistentes al calor. Por eso también es importante de que te asegures que la comida ha sido correctamente conservada en frío tras ser cocinada
  • El agua debe ser potable, preferiblemente embotellada, sin cubitos de hielo

A tu vuelta puedes realizarte un diagnóstico de heces en caso de que hayas tenido diarrea durante tu viaje. Se puede realizar un análisis en heces de la microbiota intestinal e incluir el análisis de los parásitos más frecuentes adquiridos durante los viajes. De este modo, podrás tratarte lo antes posible en caso de infección

Los parásitos que puedes añadir a tu Estudio de disbiosis intestinal son:

Giardia lamblia

Entamoeba histolytica

Cryptosporidium spp

Blastocystis hominis

Dientamoeba fragillis

Cyclospora cayetanensis

Puedes contactar con nosotros en llamando al 918459876 y te contaremos cuál es la prueba diagnóstica más adecuada en tu caso