Si estás leyendo este artículo es porque te interesa el sobrecrecimiento bacteriano del intestino delgado, porque lo estás sufriendo o conoces algún amigo o familiar que lo tiene o crees que lo pueda tener. Si quieres más información, en este artículo te cuento las 5 preguntas frecuentes sobre el SIBO
Soy el Dr. Jaume Fontanals especialista en SIBO, Medicina Integrativa y Microbiota Intestinal. Hace 3 años descubrí la importancia que tiene la microbiota intestinal para el correcto funcionamiento del resto del sistema digestivo que influye en el organismo, decidí estudiarla en profundidad y especializarme.
Desde hace unos meses cuento con mi propia consulta en la que el 95% de mis pacientes sufren SIBO y, en su gran mayoría, esto es debido a una disbiosis intestinal.
Como profesional, creo firmemente en la personalización de los tratamientos, ya que atender a las necesidades de cada paciente es un pilar fundamental para ser eficaces. Además, siempre procuro que los tratamientos sean lo más naturales posibles para invadir lo mínimo al organismo.
En la primera consulta nos dedicamos a hablar y conocernos: realizamos la historia clínica de una forma muy detallada y llevamos a cabo un pequeño cuestionario para obtener toda la información. Es importante dedicar tiempo a este primer punto para saber cómo actuar después.
1. SIBO: ¿Cuál es su origen?
Los profesionales diagnosticamos a una persona de SIBO (Small Intestine Bacterial Overgrowth) cuando existe un sobrecrecimiento de bacterias en el intestino delgado. El síntoma principal es la distensión abdominal, que puede venir acompañada de estreñimiento, descomposición, pérdida de peso, gases, dolor abdominal…
Esta situación no se produce de un día para otro, sino que poco a poco las bacterias patógenas han ido colonizando el intestino delgado, a veces sin darnos cuenta.
El origen de esta migración bacteriana puede ser diferente dependiendo de cada paciente:
–Disbiosis Intestinal
–Mala alimentación
–Hipoclorhidria
–Mala detoxificación hepática
El primer paso para comenzar un tratamiento es identificar el punto de origen. Me encanta decirles a mis pacientes que esto es como los jardineros, que tienen que
arrancar con cuidado y con los métodos adecuados las raíces de las malas hierbas, porque si no las esporas se expanden con facilidad y colonizan el resto del jardín.
2. ¿Cómo puedo saber si tengo SIBO?
Para confirmar si existe o no sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado, es necesario realizarse un test de aire espirado.
El test de aire espirado es una herramienta diagnóstica que permite evaluar la presencia de un sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado. Consiste en recolectar muestras del aire espirado del paciente y analizar las concentraciones de diferentes gases, como hidrógeno y metano, que pueden ser indicativos de la presencia de bacterias en el intestino delgado, tras la toma de lactitol o lactulosa de forma controlada.
En consulta siempre hago hincapié en que, aunque estas pruebas se puedan hacer desde casa, es importante que sea un profesional quien estudie el resultado, ya que no solo hay que atender los síntomas de cada paciente, sino otros factores como su trabajo, dónde vive, antecedentes… Como profesional me he encontrado algunos casos en los que el resultado del test era negativo y, sin embargo, tras analizar detalladamente la historia clínica y los síntomas del paciente, hemos comenzado el tratamiento para mejorar su calidad de vida.
El funcionamiento del test de aire espirado SIBO se basa en la fermentación de azúcares suministrados por las bacterias presentes en el intestino delgado. En condiciones normales, este proceso ocurre en el intestino grueso y los gases resultantes, como hidrógeno y metano, son eliminados a través del aliento. Sin embargo, en caso de sobrecrecimiento bacteriano, las bacterias colonizan el intestino delgado y producen síntomas y alteraciones en la absorción de nutrientes.
Antes de realizar este tipo de pruebas, es importante tener en cuenta algunas indicaciones previas. Es necesario no haber consumido antibióticos en los últimos 30 días y no tomar medicamentos laxantes, antidiarreicos, probióticos ni procinéticos en los 2 días previos al test.
Si esta prueba se realiza pautada por un profesional, tendrá en cuenta la medicación o suplementación que toma cada paciente y le podrá dar instrucciones específicas dependiendo cada caso.
También se debe seguir una dieta específica el día anterior a la prueba y enjuagar la boca con un colutorio. Es fundamental estar en ayunas durante al menos 12 horas y abstenerse de fumar antes de la toma de muestras. Durante el test, se debe evitar comer, fumar, mascar chicle. dormir y hacer ejercicio físico.
Es una prueba no invasiva ni dolorosa para el paciente, pero requiere de tiempo y paciencia para seguir las pautas de los profesionales o, en su defecto, realizarla correctamente desde casa.
3. ¿Es el SIBO una moda?
Esta pregunta ha llegado a mis oídos en diferentes ocasiones.
Desde hace unos meses, el SIBO es el protagonista de muchos vídeos de TikTok, ha aparecido en telediarios, portales digitales… Hubo unos días que incluso me contactaron de diferentes medios para entrevistarme.
No puedo explicar el interés repentino por este fenómeno, pero puedo decir bien alto que no es una moda, es una condición de la salud que un gran porcentaje de la población padece y que merece la atención y seriedad de cualquier otra.
Algunos pacientes acuden a especialistas desesperados porque, tras muchos años buscando ayuda o incluso tratándose por su cuenta y riesgo, no obtienen resultados y su día a día es realmente insufrible.
Muchos compañeros de profesión no comparten conmigo la realidad que es el SIBO, los protocolos que existen para combatirlo y cuando reciben pacientes con una grave distensión abdominal, tengo conocimiento que les han diagnosticado directamente Síndrome de Intestino Irritable; otros les intentan tranquilizar con “sólo son gases no te preocupes”… No puedo expresar la impotencia que siento cuando los pacientes me confiesan sus experiencias…
No nos dejemos guiar por perfiles de redes sociales que no tienen el respaldo de un profesional. Algunas personas cuentan su experiencia con el SIBO en TikTok o Instagram y a mí me parece genial, siempre y cuando la persona que lo esté viendo, sepa que cada paciente es diferente y que lo correcto es acudir a un profesional.
4. ¿Todo el mundo que sufre inflamación intestinal tiene SIBO?
Para nada. Si es cierto que la distensión o inflamación abdominal es el principal síntoma de un paciente con sobrecrecimiento bacteriano, hay muchas otras situaciones que pueden manifestarse con inflamación y no por eso se diagnostica directamente de SIBO.
La inflamación abdominal puede ser causada por una variedad de factores, desde hábitos cotidianos hasta trastornos más serios. Estreñimiento, enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), Síndrome de Intestino Irritable (SIS), diferentes intolerancias, una mala alimentación, ciertos medicamentos como la acarbosa son solo algunos de posibles causas de la inflamación intestinal.
En caso de que la distensión abdominal persista o comiencen nuevos síntomas como el dolor abdominal, vómitos, diarrea, siempre hay que acudir a un profesional.
5. ¿Cuáles son las diferencias entre la disbiosis intestinal y el SIBO?
Muy sencillo. Una es la causa de la otra.
La disbiosis intestinal es un desequilibrio en la composición y función de la microbiota intestinal (conjunto de microorganismos que habitan en el intestino). Puede ser causada por varias razones y es importante identificar y tratar esta condición para prevenir problemas de salud a largo plazo.
Mientras que el SIBO, o Sobrecrecimiento Bacteriano del Intestino Delgado, se refiere a una condición en la cual hay un aumento anormal de bacterias en el intestino delgado. Esta proliferación bacteriana puede ser causada por diferentes factores que alteran el equilibrio natural del sistema gastrointestinal.
Uno de los principales orígenes de un SIBO es la disbiosis intestinal. Esto significa que el intestino grueso ha sido colonizado por un número mayor de bacterias patógenas que han sido capaces de trasladarse al intestino delgado, provocando este sobrecrecimiento.
La disbiosis intestinal generalmente se origina por el uso excesivo de antibióticos, una dieta pobre en fibra y alta en grasas, el estrés crónico y enfermedades como el síndrome del intestino irritable.
Sus síntomas incluyen problemas digestivos, problemas de piel, problemas de sueño, cambios de humor y una disminución del sistema inmune.
Por otro lado, el SIBO es causado principalmente por el uso prolongado de antibióticos, el consumo excesivo de alimentos ricos en carbohidratos fermentables, la enfermedad intestinal inflamatoria y el síndrome del intestino irritable. Sus síntomas más comunes son la diarrea, los gases, el malestar abdominal y la hinchazón.
Como profesional, en la mayoría de los casos recomiendo a mis pacientes llevar a cabo un Estudio de Disbiosis Intestinal e Inflamación Sistémica, ya que con tan solo una muestra de heces, obtenemos información privilegiada para determinar el tratamiento más eficaz.
Es muy satisfactorio explicar los informes a los pacientes, en mi caso siempre acompañado de algún dibujo o croquis, porque es cuando entienden el origen de su malestar. Por decirlo de alguna manera, después de mucho tiempo ven la oportunidad de mejorar y obtener una mejor calidad de vida.
Una vez que estoy seguro que han comprendido los pasos que vamos a seguir, estamos listos para empezar.
Si quieres saber más sobre SIBO, puedes escuchar el episodio del pódcast Un Viaje al MicroMundo en el que participé.
La microbiota, junto con el intestino, gobierna gran parte de nuestro organismo. Cuidémosla. Merece la pena.
Dr. Jaume Fontanals, Especialista en tratamiento SIBO, web: drfontanals.com