Cuando existe una alergia, los anticuerpos detectan como dañino algo que no lo es y reaccionan frente a él.
Los alimentos que producen más alergias son: los huevos, la leche, el marisco, los frutos secos, el trigo, legumbres, la soja, las frutas y el pescado.
mediadas por el anticuerpo IgE. Producen síntomas de manera casi inmediata, como picor, hinchazón y en casos graves shock anafiláctico.
mediadas por IgG. Producen síntomas más tardíos (dentro de las primeras 72 horas) que son más inespecíficos como, por ejemplo, diarrea, migraña y aumento de peso.
En la alergia ocurre una activación errónea del sistema inmune, mientras que en la intolerancia alimentaria, no existe tal activación, sino que puede deberse a la falta de una enzima.
Si te sientan mal ciertos alimentos, recomendamos realizarse un estudio de sensibilidad alimentaria. Además puede realizarse un estudio de microbiota intestinal para evaluar el estado de la microbiota y el funcionamiento del sistema inmune.