El cáncer colorrectal o de colon supone el tumor maligno de mayor incidencia en España si se cuentan ambos sexos, con 41.441 nuevos casos cada año. La mayoría se detecta tarde, aún sabiendo que su detección precoz aumenta la supervivencia. Para prevenir su desarrollo se recomienda seguir una dieta y estilo de vida saludables, además de participar en cribados para su detección en fases tempranas.
¿Qué es el cáncer colorrectal?
El cáncer colorrectal es un trastorno que sucede en el colon y/o recto, y es causado por la proliferación aberrante de células epiteliales glandulares en el colon. Existen tres tipos de CCR:
- Esporádico
- Hereditario
- Asociado a colitis
La mayoría de los cánceres colorrectales se desarrollan a partir de pólipos, es decir, tejido adicional que crece en el intestino grueso o colon. Con el paso del tiempo, estos pólipos crecen y aumenta el riesgo de malignidad.
Se desconoce cuánto tiempo tarda el adenoma temprano en progresar a carcinoma y producir el CCR, pero la evidencia actual sugiere que no debe de ser inferior a diez años, lo que ofrece abundantes oportunidades para la detección seguida del tratamiento.
Por lo tanto, la detección precoz de cualquier pólipo es esencial para reducir el riesgo de desarrollar esta enfermedad.
Incidencia del cáncer de colon
El cáncer colorrectal (CCR) representa un importante problema de salud, pues es el tercer cáncer más comúnmente diagnosticado y el segundo más mortal a nivel mundial.
En 2020 se registran aproximadamente el 9,4% de las muertes. Sin embargo, debido al aumento significativo en el número de casos identificados, se estima que la incidencia mundial se duplicará para 2035, sobre todo en países menos desarrollados.
El estilo de vida moderno de los países occidentalizados se caracteriza por el sedentarismo y una dieta rica en grasas saturadas, azúcares refinados, alimentos procesados, consumo excesivo de carnes rojas y escasa ingesta de fibra y vitaminas. Este tipo de alimentación se conoce como dieta occidental y, junto con un estilo de vida moderno, es un factor clave que contribuye al desarrollo de cáncer de colon.
De hecho, el Instituto Americano de Investigación del Cáncer (AICR) sugiere que el CCR podría prevenirse hasta el 50% de los casos, modificando factores de riesgo como la dieta y el estilo de vida. En contraste, afirma que el consumo de cereales integrales, fibra dietética y productos lácteos disminuyen el riesgo de CCR.
Factores de riesgo para desarrollar cáncer de colon
Tanto los factores ambientales como los genéticos determinan el riesgo de desarrollar CCR. El riesgo de desarrollar CCR en pacientes con colitis ulcerosa de larga duración o enfermedad de Crohn aumenta con la edad.
Múltiples estudios han demostrado que los factores de riesgo para el CCR incluyen:
- Dieta y estilo de vida (obesidad, sedentarismo, alcohol, tabaco, consumo de carnes rojas y procesadas)
- Antecedentes médicos personales (sexo, edad, raza, pólipos adenomatosos) y familiares
- Inflamación crónica (enfermedad inflamatoria intestinal)
Tanto la obesidad, como la inactividad física y una dieta occidentalizada son factores modificables de gran impacto en la salud de las personas, pues contribuyen al desarrollo de diversas enfermedades y, en especial, del cáncer de colon. Actuar sobre estos factores de riesgo modificables (dieta y estilo de vida) debería de ser el objetivo de las estrategias de prevención de cáncer de colon.
La carne roja ha sido incluida en 2015 en la lista de sustancias que pueden contribuir al desarrollo de cáncer, por la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC). La carne procesada es cancerígena (Grupo 1), mientras que la carne roja es probablemente cancerígena (Grupo 2A). Se recomienda que la ingesta de carne roja se limite a menos de tres porciones semanales, lo que corresponde a 350–500 g de peso cocinado y se debe evitar la carne procesada, más aún los alimentos ahumados y que contienen nitritos.
En cambio, una dieta rica en fibra dietética, especialmente en cereales integrales, frutas y verduras, parece tener un efecto protector. La reducción del pH fecal inducida por la fermentación de la fibra dietética disminuye la producción de carcinógenos bacterianos derivados del metabolismo de los ácidos biliares. La acidificación intraluminal reduce el tiempo de tránsito intestinal y la exposición de las células del colon a carcinógenos.
Por lo tanto, el consejo dietético actual para evitar el desarrollo de CCR tiene como objetivo limitar las dietas occidentales poco saludables, ricas en grasas y proteínas, a favor de un mayor consumo de frutas, verduras y cereales, o la llamada dieta mediterránea.
Cáncer de colon, la detección precoz importa
La identificación en fases tempranas de adenomas precancerosos de gran tamaño y consiguiente su extirpación evita la progresión de estos adenomas a carcinoma, reduciendo la incidencia de cáncer colorrectal.
Se ha demostrado que la detección precoz mediante cribado mejora la mortalidad
La mayoría de los cribados se realizan entre 50 y 75 años. Lo cribados más utilizados actualmente son:
- FIT (prueba inmunoquímica fecal). Prueba de cribado para identificar sangre oculta en materia fecal. La sangre en heces puede que sea un signo de cáncer colorrectal o de otros problemas como pólipos, úlceras o hemorroides.
- Colonoscopia. Procedimiento que explora el interior del colon y recto por medio de un endoscopio flexible que se introduce por el ano. Es muy importante que el colon esté limpio para poder buscar pólipos, por lo que es necesario realizar una dieta especial sin fibras y tomar unos preparados que limpian el colon antes de realizar la prueba. Tiene una altísima capacidad de detectar lesiones y puede extirpar la mayoría de los pólipos en el momento.
Sin embargo, el sangrado rectal no siempre es indicativo de cáncer colorrectal, en especial los CCR en etapa temprana y los adenomas avanzados.
Por otro lado, la tasa de participación para la realización de una colonoscopia es demasiado baja probablemente debido a la estricta preparación intestinal previa.
El método más efectivo para reducir las muertes relacionadas con CCR es la detección temprana, ya que la probabilidad de supervivencia supera el 90% .
Así pues, surge ColoAlert, una nueva prueba de cribado en heces con alta sensibilidad (85%) y especificidad (92%) para detectar tumores/adenomas hemorrágicos y no hemorrágicos. Es el primer test en Europa que combina:
- Biomarcadores genéticos. Detecta neoplasias de forma temprana en heces: mutaciones KRAS, BRAF y cuantificación de ADN humano (ANDh). Las mutaciones en los genes KRAS y BRAF están asociadas a un riesgo más elevado de padecer la enfermedad y su determinación puede ser útil para la correcta elección del tratamiento antineoplásico.
- Sangre oculta en heces (FIT)
Se trata de una prueba sin restricciones dietéticas, fácil y rápida de realizar (solo 5 minutos), segura y no invasiva, que facilita al paciente la realización de la prueba y así detectar con tiempo el cáncer.
Un simple test puede salvar vidas, ¡Conoce ColoAlert!